Para 2030, está previsto que 2 billones de puestos de trabajo vayan a desaparecer, lo que representa aproximadamente el 50% de puestos disponibles en el planeta. ¿Qué significado tendrá esto para nosotros en sólo 13 años? ¿Será que estaremos devastados por el desempleo y la inequidad social? ¿O será que habremos entrado en una época dorada del desarrollo?

En Grecia, la época clásica (entre el Siglo 4-5 AC) implicó una explosión cultural de desarrollo en filosofía, ciencia, arquitectura, arte, teatro, literatura y la fundación del sistema político conocido como la Democracia. Fue un período de creación y producción intensa que indudablemente marco el desarrollo del mundo Occidental como lo conocemos hoy.

El catalizador que llevó a que este período pudiera surgir fue la transición de la subsistencia en base a la agricultura y que todo hombre se valga a sí mismo, al desarrollo de la cosecha moderna y el surgimiento de la clase burguesa con el comercio en forma colectiva. En este punto podemos ver como los modelos social, económico y político se diversifican en gran manera. Por sobre todo, podemos ver la creación del concepto de tiempo libre. Naturalmente, ¿cómo puede un hombre que tiene que cultivar la tierra desarrollar tiempo para observar las maravillas del mundo? Él necesitará de alguien para que trabaje esa tierra en su lugar. Analicemos el surgimiento de la esclavitud. Con todo el arduo trabajo del día completo, el hombre tiene más tiempo para organizar sus campos y considerar otras cosas. El concepto del trabajo y tiempo libre resurge y tenemos un nuevo sistema de jerarquía: los que tienen el tiempo libre, y los que no.

Ante la ausencia de una segunda etapa de esclavitud, ¿qué podría modificar nuestro sistema socio-económico de forma tan significativa que liberase a la fuerza de trabajo a tal punto? Miremos alrededor y podremos adivinar: desarrollo de Inteligencia Artificial, chatbots, autos no tripulados, tecnología de todos los días. En nuestro mundo moderno, los humanos no necesitan hacer todo el trabajo que se pueda automatizar.

Analicemos el desarrollo de los robots.

Está estimado que para 2030, habremos perdido 2 Billones de puestos de trabajo alrededor del planeta. La mayoría de estos trabajos implicarán la reducción de empleos no profesionalizados. Más y más trabajos requerirán menor trabajo humano porque un robot podrá hacerlo mejor. ¿Será esto considerado una tragedia para los trabajadores poco profesionalizados? ¿O será que haber encontrado mayor tiempo para tiempo libre reorganizará nuestro mundo para dejarnos involucrar con más pensamientos abstracto-creativos? ¿Sera que la población pasará de trabajar porque necesitamos obtener un ingreso a involucrarnos más con el modelo económico actual, o pasaremos a tener población que trabaja porque quieren y porque sienten pasión por algo, porque tienen un talento?

Gallup ha estado midiendo el compromiso laboral de los empleados en los Estados Unidos desde los años 2000 y ha notado números consistentes cuando se refiere a empleados activos, entusiastas y comprometidos con su trabajo. Ese número es 32%, con un porcentaje global de solamente un 13%. El resto de los empleados, el otro 68-87% son significativamente menos productivos, pero igualmente pagos con respecto a sus colegas altamente productivos y motivados.

Los empleados poco felices no son solamente disruptivos en sus ámbitos laborales, sino que también generan presión en nuestros sistemas de salud. Estudios estadísticos de campo de la Universidad de Carnegie Mellon ha por primera vez demostrado evidencia que estar bajo un estrés psicológico continuo contribuye significativamente a más altos porcentajes de atracción de enfermedades porque el Sistema inmunológico del cuerpo humano pierde su capacidad de respuesta.. ¿Qué pasaría con nuestros sistemas de salud si pudiéramos reducir el número de personas que reciben tratamientos por cuestiones de estrés laboral?

Preparándonos para el mundo digital, Finlandia ha comenzado a evaluar un ingreso universal donde selecciono al azar 2000 ciudadanos desempleados para que reciban un subsidio de supervivencia. Ellos continuaran pagando este importe aun si estas personas encuentran empleo.

En el World Government Summit en Dubai, Elon Musk advirtió que los gobiernos necesitaran comenzar a mirar seriamente el ingreso universal a medida que más trabajos se automaticen. A pesar de esto, el expreso preocupación que el mayor desafío será que las personas encuentren significado en un mundo donde mucho de nuestro propósito sale de nuestro empleo.

Estamos ante un punto de inflexión. Trece años nos separan de la potencial perdida de 2 billones de puestos de trabajo. En un nuevo tiempo, que requiere cambios y adaptaciones de los sistemas políticos, económicos y sociales del mundo entero. ¿Responderemos asertivamente? ¿Abrazaremos nuestro tiempo libre y adaptaremos nuestros sistemas socio-políticos para que se acomoden a nuestras vidas? ¿Ajustaremos lo que tenemos o pondremos en proceso nuevas ideas? ¿Si nuestra tecnología está desarrollándose de forma improcedente, que nuevas innovaciones descubriremos a lo largo del tiempo que tendremos para crear?

Tal vez estamos en las puertas de una nueva explosión cultural. Camino a 2030, el amanecer de la próxima época dorada de nuestra generación.