Mi experiencia en la Competencia Internacional de Ensayos del Banco Mundial
*María de los Ángeles Lasa fue participante del SABF 2009 y actualmente es delegada del SABF en la Universidad Católica de Córdoba. Este año decidió participar de la Competencia Internacional de Ensayos del Banco Mundial y obtuvo el segundo premio. *
Mi historia podría resumirse de la siguiente manera: concluí con mis estudios universitarios (Relaciones Internacionales – Universidad Católica de Córdoba), comencé a buscar trabajo y no encontraba, de modo que, lo que siguió, fue una profunda falta de autoconfianza y una depresión difícil de explicar. Para desgracia mía, nada parecía mejorar, pero entonces recordé una hermosa historia que había leído en una oportunidad: La mano de la Princesa.
Me gustaría contarles esta hermosa historia, pero prefiero que la lean ustedes mismos. Mientras tanto, sigo contándoles que la historia de la princesa me ayudó a cambiar mi perspectiva y me motivó a iniciar un proyecto para ayudarme y ayudar a otros jóvenes en mi misma situación. Así di inicio a Todo Jóvenes, un sitio web informativo con oportunidades académicas y laborales para jóvenes entre 15 y 30 años, que hoy cuenta con un total de seis voluntarios, incluyendo a tres SABFers que conocí en la V Edición del Foro: Karina Cáceres, Patricia Fernández Bugna y Mariana Sanmartín.
Para fines del año pasado, el sitio web –a pesar de su humilde diseño– recibía más de 200 visitas diarias, y recibimos cartas de jóvenes contándonos cómo Todo Jóvenes los había ayudado a mejorar su situación académica/laboral. Por ello, cuando en enero se abrió la convocatoria anual para escribir sobre desempleo juvenil en el World Bank International Essay Competition 2010, pensé que sería una buena idea contar mi historia. Mi ensayo, pues, se tituló: Todo Jóvenes: de la princesa miope al cambio de enfoque.
Por esas paradojas de la vida, en abril del presente año conseguí un empleo, y en el primer día de mi nuevo trabajo recibí un mail desde la oficina del Banco Mundial en París informándome que era una de las 8 finalistas de la competencia de ensayos. Fue una sorpresa enorme y una gran alegría, no sólo porque sería la única representante de América Latina, sino porque también podría contar una historia que viven a diario muchos jóvenes en Argentina y el mundo.
Después de que arreglaran mis itinerarios de vuelo y algunas otras cuestiones legales, partí para Estocolmo (Suecia) el 29 de mayo. Allí, desde el 31 de mayo hasta el 2 de junio, se celebró la Annual Bank Conference on Development Economics 2010 (ABCDE 2010), y en el marco de tan extraordinaria conferencia, tuvo lugar el Jurado Final de la Competencia de Ensayos.
Mi participación en la Conferencia y en el Jurado Final fue increíble. En la primera tuve el privilegio de asistir a conferencias de cinco premios Nobel, entre ellos Elinor Ostrom y Joseph Stiglitz, autores de libros y papers con los que estudié en la Facultad. Y ante el Jurado compuesto por doce jueces de diversos países del mundo y con diversas profesiones, tuve el honor de defender mi ensayo el 1º de junio. Fue una oportunidad única que viví con tranquilidad y mucha pasión, y cuyo resultado fue la obtención del segundo premio compartido con Maureen Omoro de Kenya.
Regresé al país el 7 de junio, después de recorrer una ciudad preciosa, de asistir a una Conferencia de primer nivel y de conocer historias de otros jóvenes, hermosas y conmovedoras. Y yo sé que no consta en un certificado, ni en mi pasaporte, ni en ninguna foto, pero les aseguro que todo lo que viví fue la confirmación de que no importa que tan sencilla sea nuestra idea para cambiar la realidad, ni cuántos recursos tengamos para ponerla en práctica: cuenta nuestra convicción, nuestra fuerza de voluntad y nuestra fortaleza para no aceptar ningún límite a la hora de hacer del mundo un mejor lugar y para intentar cambiarlo en lo que creemos que debe ser cambiado.